lunes, 31 de diciembre de 2012

Año nuevo, vida no nueva.

Sí, amigos, tan sólo quedan unas cuantas horas para que ese 2012 que tantos quebraderos de cabeza nos regaló desaparezca para siempre. Con él se va el año más duro en España desde que, se dice es una democracia. Iba a acotar en términos económicos, pero sería injusto para todas aquellas personas que a lo largo de estos 366 días han salido a la calle a reclamar lo que es suyo y como agradecimiento por su aportación a la sociedad se ha ido con tres porrazos a casa.

Sí, amigos, sin duda los Mayas no se equivocaron en el qué, sino en el quién, pues lejos de que el fin del mundo haya llegado para la humanidad, sí que lo ha hecho para numerosas personas españolas que ahora tienen que rendir visita en estas fiestas a sus familiares en albergues en el mejor de los casos, o en cementerios en el peor de los mismos (no sé si esto que acabo de hacer es frivolizar, y si alguien se ofende, que me perdone, pero Estaña está como está).

El caso es que la frase de 'Año nuevo, vida nueva', nunca pudo tener menor sentido en la historia mundial. Parece ser que el que goza, seguirá gozando (ahí sigue Urdangarín cenando con el Rey...), y el que sufre, seguirá sufriendo. Lejos de ver atisbos de recuperación, el Gobierno de Mariano Rajoy ha decidido traernos carbón por Reyes en forma de factura doméstica. El recibo de la luz nos costará un 8,3% más que en el horrible 2012. Si caes enfermo, sigues siendo un ser despreciable que vive por encima de sus posibilidades, así que paga un euro cada vez que te extiendan una receta, por derrochar con tu bronquitis.

Si usted es de esos que piensa que viajando se ahogan las penas, no puede estar más equivocado. En autopistas de peaje de titularidad estatal el ticket subirá un 2,4% y un 3,3% en las de dominio autonómico. Si aún no tiene la suerte de vivir el 'American way of life' que dio pistoletazo de salida a este capitalismo caníbal y no ha podido comprarse un vehículo, tampoco se librará del tasazo. Cercanias y viajes de media distancia en tren subirá un 3%.

Tranquilo, tranquilo. Siempre podrá fumarse un cigarrillo para calmar iras y abstenerse de comprar un rifle francotirador y hacer guardia en la puerta del Congreso. Ah no, Altadis ha anunciado otra subida en el precio de las cajetillas de tabaco. Mala suerte amigo. Usted ha fumado por encima de sus posibilidades.

Por último, si usted reside en una de las dos ciudades más grandes de España, aún hay peores nuevas. Si es 'chulapo', pagará 4,2% más de agua, 6,9% más de IBI y 2,5% más en zona azul. Pero si usted ha sido tan rematadamente estúpido de haberse creído el proyecto de Artur Mas, enhorabuena, porque va a ser premiado con una subida de un escalofriante 18% en el agua en la Ciudad Condal.

Sí, señores, ya pueden empezar a pensar en su deseo para el año venidero, ya pueden ponerse una prenda roja para entrar con buen pie, ya pueden brindar y comerse las 12 uvas una tras otra para evitar el mal fario, que falta nos va a hacer. Ah, y rece porque haya un acuerdo fiscal en EEUU.

No hay comentarios:

Publicar un comentario